Mano humana, en la que se aprecia la nomenclatura usada para reconocer a los dedos, siendo el dedo o dígito I el pulgar y el V el meñique. Modificado de la Wikipedia. Limusaurus inextricabilis, es un nuevo terópodo ceratosáurido del Jurásico de China. A simple vista la principal característica de este dinosaurio es su pico sin dientes y su dieta herbívora, que yo sepa la única entre los ceratosáuridos, con un cuello alargado y un cierto parecido a otro grupo de terópodos, los ornitomimiformes. De hecho, así lo cataloga National Geographic. Un estudio más detallado muestra un dígito I muy reducido y un metacarpo en la base del dígito II igual al que presentan otros terópodos en el, hasta ahora considerado, dígito I. Estos rasgos indican una reducción de los dedos a una "forma aviana" muy temprana en la evolución terópoda. Además otro dato importante es que todo esto se presenta en un miembro de los ceratosáuridos, es decir aquel grupo que incluye a todos los terópodos más emparentados con Ceratosaurus que con un gorrión (Passer domesticus). Ya se que para un profano en la materia esta definición no ayuda mucho pero, que quereis que haga, si es la oficial. Bueno, ¿ y en que se traduce todo este rollo de los dedos? Pues en que, hasta ahora, los paleontólogos estaban equivocados al identificar los dedos de los terópodos, así pues lo que hasta ahora eran considerados dígitos I, II y III son, en realidad, los dígitos II, III y IV. Al menos eso es lo que dicen los autores del estudio.
Mano y fósil de L. inextricabilis. No han tardado en aparecer las primeras voces discordantes sobre esta conclusión, argumentando, entre otras cosas, que al hablar de un terópodo herbívoro con una ecología muy distinta al del resto de terópodos, casi todos carnívoros u omnívoros, presentaría una serie de adaptaciones únicas dentro del grupo. Es decir, que la reducción del dígito I sería independiente, habiéndose desarrollado una vez en L. inextricabilis y otra en las aves. Pero también es cierto que lo expuesto por Xu y colaboradores goza de la bendición de la parsimonia.
Artículo:
- Xu, X., et al. 2009. A Jurassic ceratosaur from China helps clarify avian digital homologies. Nature 459: 940-944. Abstract.
Muy interesante! Con esta duda calarada la hipotesis del origen dinosauriano de la aves es más un hecho que otra cosa.
ResponderEliminarY una prueba más contra el "diseño inteligente": la evolución hace chapucillas aprovechando lo que ya existe, en vez de partir de cero.
Lo que yo me pregunto es como estamos tan seguros de que las aves perdieron los dígitos I y V. ¿Será por que los embriones forman los cinco dedos y luego reasorben precisamente esos?
vaya, ya no podre pensar mas en los ceratosauridos como un grupo que mantuvo su forma primitiva apenas sin cambios.
ResponderEliminarlo de la polemica de los dedos me ha recordado una serie de entradas en tetrapod sobre el origen de las aves, sobre si realemnte venian de los dinosaurio o no, quizas las has leido, sino te interesaran, estan de hace poco.
saludos
seguramente pronto habrá un nuevo fósil aclarando el asunto, lo del chino me suena algo creible, aunque no sé porqué tengo algunas suspicacias aún. De cualquier modo suena coherente.
ResponderEliminarMe sumo a la sugerencia de Gouki, pero tb a que mires los comentarios, hay hasta "pelea de barra".
Darkrosalina: Pues si una prueba más del origen dinosauriano de la evolución. Y otro de los llamados eslabones perdidos, otro golpe más al DI y al creacionismo!!! :D
ResponderEliminarGouki: Gracias por avisarme sobre esas entradas! llevaba tiempo sin visitar Tetrapod, cuando tengo tiempo lo leeré.
Dinorider: Parece ser q esa confusión con los dedos ya habia sido propuesta por un investigador, ahora mismo no encuentro esa info.
Tranqui! vere tb los comentarios aunq con mi nivel de ingles me costará un poco :D
merci crack
ResponderEliminarLa Revista Nature publicó recientemente el hallazgo de Limusaurus inextricabilis, un ceratosaurio del Jurásico de China (Xu et al., 2009), que por sus características, constituye un nuevo antecedente en la dilatada controversia sobre la homología digital de las aves.
ResponderEliminarAlgunos medios han señalado que este nuevo hallazgo viene a resolver el problema con relación a la homología digital de las aves y que plantea que mientras las aves evidencian los dígitos II, III y IV, los dinosaurios evidencian los dígitos I, II y III, haciendo inviable una hipotética descendencia de éstas a partir de un linaje de dinosaurios como han venido sosteniendo los paleontólogos de manera general desde ya hace mucho tiempo. (Huxley, 1868)
Por otra parte, los paleontólogos siempre han sostenido que los dinosaurios terópodos evidencian un patrón de reducción digital que afecta a los dígitos IV y V, tal como se aprecia en Herrerasaurus ischigualastensis (Reigg, 1963), un téropodo del Triásico Medio de Argentina y datado en unos 228 millones de años. Dicha reducción digital y la correspondiente funcionalidad de los dígitos I, II y III que evidencia Herrerasaurus, se manifesta de manera transversal en todo el clado Theropoda (Marsh, 1881) y está ampliamente documentada por el registro fósil, observándose tanto en Ceratosauria (Marsh, 1884) como Tetanurae (Gauthier, 1986), salvo algunos casos excepcionales en ambos clados.
La identificación digital de los dedos dinosaurianos, está fundamentada fuertemente en aspectos morfológicos y que dan cuenta de una fórmula falangeal (2-3-4) bien conservada en todo el clado Dinosauria (Owen, 1842) y que además constituye un rasgo plesiomórfico observado ya en Tulerpeton, que surgió muy temprano en el Devónico Superior, antes incluso que el origen de los Tetrapoda y que se extiende, dentro de Archosauria (Cope, 1869), a todos los dinosaurios.
Esta fórmula falangeal se observa en Deinonychus antirhopus (Ostrom, 1969), un terópodo de fines del Cretácico y es idéntica a la que evidencia el ave más antigua de que se tiene noticia, Archaeopteryx lithographica (Meyer, 1861), del Jurásico de Alemania, permitiendo ver que esta fórmula es compartida por las aves y se extiende por consecuencia hasta las aves modernas, observándose aún hoy en Ophistocomus hoatzin, que presenta tres dígitos bien formados en estado embrionario con garras y huesos metacarpianos libres (no fusionados) notablemente semejante a la de Archaeopteryx.
La discusión se ha dilatado por casi 150 años y si bien se han presentado pruebas e información adicional basada en análisis moleculares, cuyos resultados son reconocidos como válidos por Xu et al., en su publicación de Limusaurus (Vargas y Fallon, 2004. Vargas et al 2008), aún existe un sector que se resiste a aceptar lo que las evidencias nos indican (Feduccia, 2002).
En este contexto, el hallazgo de Limusaurus, que manifiesta un rasgo anómalo en su estructura digital, viene a aportar un nuevo antecedente a considerar dentro de la discusión, pero no constituye un antecedente que vaya a provocar una mayor variación respecto al problema tal como lo entiende la Paleontología, constituyendo en consecuencia, y hasta donde lo indica el registro fósil, una autapomorfía característica del género pero no un rasgo que deba hacerse extensivo dentro de Theropoda, manteniéndose entonces la misma posición fundamental, a saber, las aves son descendientes de los dinosaurios con un desarrollo digital que comprende los dígitos I, II y III, y cuya evolución y desarrollo se verifica dentro del clado Maniraptora, evidenciando rasgos plesiomórficos de Theropoda, su clado más inclusivo dentro de Dinosauria.
Roberto Díaz Aros
Centro de Estudios Paleontológicos de Chile
http://www.cepchile-paleontología.es.tl
Vargas, AO, Wagner GP, and Gauthier, JA. Limusaurus and bird digit identity. hdl.handle.net/10101/npre.2009.3828.1
ResponderEliminarEsta es nuestra respuesta al paper de Limusaurus. Recientemente fue rechazada por nature, no por motivos técnicos, sino porque se estimó que no era de suficiente interés/importancia.
Lo hemos subido a Nature precedings porque nos parece que es importnate que haya una respuesta rápida y citable que a diferencia del trabajo de Xu, sea consistente con la visión de la mayoría de los paleontólogos de terópodos, puntualmente, que los dedos de los tetanuros siguen siendo I, II y III. Estamos preparando un trabajo más largo sobre este tema.
Saludos
Gracias A. vargas por toda esa información!
ResponderEliminarPerdona que halla tardado tanto en contestarte, me acabo de dar cuenta de esto!